09 noviembre 2010
Mujer Zenú: Protectora de la cultura, la biodiversidad y nuestra soberanía alimentaria
Así se han podido impulsar proyectos y programas de beneficio para la mujer a nivel legal, social y económico. Se ha logrado que las mujeres conozcan las leyes, programas y normas que se han aprobado a nivel nacional e internacional donde se promueve la participación y la equidad de las mujeres. La Recar, a mediados del año 2009 inició un proceso de capacitación para la disminución de la violencia intrafamiliar, en los municipios de San Andrés de Sotavento Córdoba, San Antonio de Palmito y Sampués, Sucre, que generó acciones de impacto y cambios de actitud en las mujeres formadas frente a la defensa de sus derechos constitucionales.
Junto con lo anterior, las relaciones de equidad se arraigan desde proyectos productivos específicos para las mujeres. Estos proyectos parten desde los colectivos y las individualidades con el objetivo no sólo de aumentar los ingresos económicos de las familias, sino también de construir soberanía alimentaria y fortalecer los mercados locales. En esta línea se han desarrollado componentes de crédito de fondo rotatorio, de transformación de productos, alimentos y plantas medicinales, etc.
Las mujeres se han dado cuenta de la gran trascendencia que tuene su labor. Han reafirmado su voluntad de actuar no sólo por ellas y sus familias, sino para cambiar este mundo en el que se privilegian los intereses del mercado por encima del derecho de las personas. El modelo industrial y las transnacionales amenazan la existencia de la agricultura indígena, la pesca artesanal, así como la fabricación artesanal y el pequeño comercio de los alimentos, sectores donde las mujeres desempeñan un papel importante.
Y aunque las mujeres han sufrido las consecuencias dramáticas de estas políticas de mercado pobreza, insuficiente acceso a los recursos, patentes sobre la vida, éxodo rural y migración forzada, guerra y todas las formas de violencias físicas y sexuales, tienen el poder de aportar significativamente en la transformación del mundo. Las mujeres continúan siendo creadoras históricas de conocimientos en agricultura y en alimentación, siguen produciendo hasta el 80% de los alimentos en los países más pobres y hoy son las principales guardianas de la biodiversidad y las semillas criollas.
Las mujeres Zenúes convierten el patio en su “tienda”, donde a diario recoge la producción de hortalizas, frutas, plantas aromáticas, medicinales, huevos, carne, leña y hasta pancoger. En definitiva las mujeres son generadoras de historia en el vínculo con nuestro territorio lo que nos hará subsistir por siempre.
Los jóvenes del resguardo Zenú
Gustavo Muslazo, habitante de la comunidad de Cruz del Guayabo, abrió las puertas de su finca y nos contó sobre su experiencia en la Asociación ASPROAL. Podemos decir que es un joven alegre, trabajador siempre dispuesto a colaborar, siempre tiene una sonrisa franca a flor de boca para regalar. Los niños, los animales e inclusive todas las plantas lo quieren. Todo porque trata con respeto y amor a cada uno de los seres que creó la naturaleza.
Tiene cinco años de estar trabajando en la asociación donde ha desarrollado muchísimos proyectos, que, como él mismo expresa son proyectos motivadores que han mejorado la calidad de vida de toda la familia. Sus sueños se ven expresados en estos proyectos que ha compartido con muchos. Y con muy poca edad, ye ha participado en varios programas de gallinas ponedoras, hortalizas, e incluso ya ofrece charlas sobre medio amiente, salud y la importancia de la agroecología como forma de vida.
Este joven sabe que la aculturación es uno de los problemas graves por el que los jóvenes se ven afectados. Al no valorar la tradición autóctona de la región, los jóvenes se van del territorio, porque es difícil luchar y trabajar por algo que no se quiere, por algo que no se siente nuestro. Así se pierden los valores, y los jóvenes en la ciudad adquieren prontamente costumbres ajenas a las de su cultura.
Nosotros los jóvenes tenemos que actuar en el presente, conocer lo que nosotros tenemos en nuestro territorio, todo lo que nos enseñaron nuestros ancestros, darnos cuenta de la enorme importancia de la cultura Zenú y lo que la tierra nos ha dado.
Gustavo tiene claro lo que quiere: para el sustento de su familia quiere montar una porqueriza de cerdo criollo y un galpón de gallinas ponedoras, y al mismo tiempo desea que su comunidad se integre a ASPROAL para que conozcan, valoren lo que tienen y que se provean de herramientas para construir un porvenir venturoso.
Definitivamente, el espíritu, el empeño de muchos jóvenes por quedarse en el territorio es de admirar; es cierto que hay nuevo interés y nuevos programas en las instituciones públicas y privadas, con el ánimo de interpretar las condiciones y necesidades de los jóvenes indígenas en cuanto representan el futuro y las generaciones de relevo. Sin embargo, no se ha enfatizado lo suficiente en su papel y sus necesidades presentes, que son causales principales para abandonar las zonas rurales.
El trabajo de la Recar y las asociaciones con los jóvenes parte de la comprensión de las necesidad es actuales de los jóvenes. Es así que ha impulsado programas y acciones para que los jóvenes no se vean frustrados en sus aspiraciones de establecer propias capacidades de autoemprendimiento o de inserción en la economía rural. Con proyectos agroecológicos, de huertas caseras, con formación política y de liderazgo, con formación para el desarrollo de habilidades comunicativas, artísticas, entre otras, los jóvenes Zenúes tienen la oportunidad de participar como sujetos activos del desarrollo de su territorio. La Recar es conciente de la necesidad de preparación y capacitación de los jóvenes, por eso busca que los programas ofrecidos den herramientas para que los procesos y proyectos iniciados por los jóvenes, se sostengan en el tiempo y así evitar que los jóvenes emigren del territorio, lo que asegura que el resguardo y la cultura Zenú no desaparezcan.
08 noviembre 2010
Semillas de Identidad en la Región Caribe
Etnia | Área de los resguardos | Población |
Wiwa | 209,6 | 128,0 |
Yukpa | 33.678,0 | 538,0 |
Arhuaco | 195.900,0 | 10.238,0 |
Embera catío | 205.185,0 | 1.361,0 |
Zenú | 83.213,0 | 31.371,0 |
Wayúu (guajiro) | 1.060.694,6 | 98.310,0 |
Chimila | 879,8 | 388,0 |
Kogui (kággaba) | 361.780,0 | 8.160,0 |
Total | 1.941.540,0 | 150.494,0 |
Semillas criollas |
Feria en Monteria |
13 noviembre 2009
DIA DE LA NO VIOLENCIA CONTRA LA MUJER
En la jornada se llevaran a cabo actos como marchas simultaneas en los municipios de San Antonio de Palmito y San Andrés de Sotavento, Conferencia en este último, referente a la violencia intrafamiliar y la Ley 1257. En el Municipio de Sampués Sucre, el día 27 de noviembre, se realizará una marcha que culminará con una exposición de 100 cuadro de rostros de mujeres que ilustran la violencia contra ellas.
A este evento se han invitado todas la organizaciones e instituciones de cada uno de los municipios de influencia de la Recar. Se espera la participación de aproximadamente 400 mujeres en el Municipio de San Andrés y un número aproximado también en el municipio de San Antonio de Palmito.
LOS CABILDOS DE SAMPUES EN GESTION TERRITORIAL Y BUEN GOBIERNO
El Cabildo Mayor Municipal de Sampés rindió cuenta de su gestión a lo largo de este año. Lo mismo hicieron los cabildos menores de Huertas Chicas y Calle Larga, las Organizaciones sociales Asproinsu y la Corporación Recar. También se hizo presenta la Fundación Swissaid Colombia, quien acompaña un proceso de capacitación y cualificación de nuevos liderazgos el el territorio del Resguardo de San Andrés de Sotavento.
Este mismo proceso se realizará en los municipio de San Andrés de Sotavento, el día 19 de noviembre y en San Antonio de Palmito el 20 de noviembre del presente año.
04 noviembre 2009
Los Zenúes, Gente de Maíz
Desde hace varios años escuchamos a expertos e instituciones hablar que el mundo está en crisis. Si, hay crisis humanitaria, ambiental, económica y aliemtaria. Pero más que exigir la solución de otros, la pregunta más importante es: ¿Qué podemos hacer nosotros desde nuestras casas, desde nuestras comunidades o desde nuestras organizaciones?
Como estas crisis no surgen de ahora, sino de procesos de muchos años, pero también han surgido propuestas y procesos de organizaciones en muchas partes del mundo tratando de construir alternativas. Es así que en el Resguardo de San Andrés de Sotavento cuatro organizaciones de productores y artesanos nos hemos organizado en la Red Agroecológica del Caribe (Recar). Desde acá nos hemos unidos a otras redes internacionales como el Movimiento Agroecológico de América Latina (Maela), con los que trabajamos por una agricultura orgánica, sin el uso de agroquímicos y protegiendo los suelos, las semillas criollas y el medio ambiente. Desde estos espacios trabajamos unidos, hombres y mujeres de todas las edades, por la utopía de una economía propia a través de los mercados locales.
Todos podemos aportar en la solución de los problemas, pero desde luego que debemos ser consiente de cuáles son las causas de ellos. No podemos resolverlos todos al mismo tiempo, pero si podemos fijarnos metas para poco a poco hacer de este planeta, y nuestra vida en él, algo que valga la pena.
Es por esto que desde nuestras organizaciones creemos que la conservación y uso de las semillas criollas hacen parte importante de esta apuesta. Este puede ser nuestro grano de arena en la construcción de esta gran casa comunitaria. Somos semillas de maíz, somos gentes de maíz. Tenemos más de 30 variedades criollas, que son el lego de nuestros antecesores que por cientos de años las conservaron para nosotros, sus hijos. Con ellas nos dejaron también un conocimiento acumulado de su uso, mediante el cual podemos disfrutar de sus ricuras y gran variedad de patos típicos. Pero ellos, los ancestros, también nos enseñaron a adorar esta planta, por eso cada cosecha es una fiesta, un jolgorio que desborda toda alegría ante la seguridad de tener alimento para nuestra comunidad y nuestras familias. Los zenúes somos gente de maíz. Por milenios, esta planta ha estado ligada a nuestra cultur, y en nuestros tiempos, seguimos atados a su existencia. Por eso, un deber histórico nos llama hoy, el deber de defenderla ante las amenazas que le suscitan las nuevas biotecnologías: Los agroquímicos, las semillas mejoradas, los monocultivos y ahora las semillas transgénicas nos han avocado a una lucha sin cuartel. En defensa de nuestros maíces criollos y en general de todas nuestras semillas nativas, La Recar ha emprendido la campaña “Semillas de Identidad”, que hoy es acogida en muchos países.
Semillas de Identidad busca generar conciencia en los pueblos y la sociedad en general sobre la importancia de conservar y proteger nuestras semillas. Fruto de esto, los Zenúes han declarado su resguardo, como Territorio Libre de Transgénicos (TLT).
Los transgénicos Asedian al Resguardo
Las autoridades indígenas afirmán que en municipios vecinos como Cereté y San Pelayo hay una gran extención de estos cultivos y temen que los miembros de este resguardo, que tienen relaciones laborales y comerciales en esta zona, puedan trensportar material genético que contamine sus semillas. La Recar, que ha venido impulsando la recuperación de semillas nativas, afirma que los indígenas Zenúes han logrado conservar en su territorio más de 30 variedades de maíz y muchas de otras especies que garantizan su seguridad aliemntaria.